Velocidad, Servicios exclusivos y Flexibilidad son algunos de las ventajas de los Vuelos privados
En la actualidad, muchos viajeros de Latinoamérica y el Caribe se preguntan si vale la pena rentar vuelos chárter. Con un crecimiento sostenido del 8% en el número de viajes con fines recreacionales o de esparcimiento (casi dos veces el promedio mundial, según la Organización Mundial de Turismo), las estimaciones del tráfico aéreo para los próximos 20 años sugieren un incremento global del 5,6% en toda la región. Evidentemente, se puede inferir que cada vez más y más viajeros dejarán de lado la aviación comercial para pasar a disfrutar de los servicios ofertados por brókeres y operadores aéreos, en particular porque el crecimiento de la industria está vinculado a la consolidación de una clase media más robusta y con mayor poder adquisitivo. Sin embargo, la mayoría de los viajeros frecuentes no está al tanto de los indiscutibles beneficios de la aviación privada.
Para expresarlo en términos sencillos, los vuelos privados lo llevan más cerca y más rápido a su destino mientras disfruta de servicios exclusivos, tratamiento VIP y los mejores estándares de seguridad. La flexibilidad es otra ventaja importantísima. Los vuelos comerciales sólo le ofrecen dos opciones: clase turista o primera clase. Y, por lo general, están sujetos a condiciones que escapan a su control tales como la disponibilidad de boletos, horarios e itinerarios fijos, rutas predeterminadas e interminables controles de seguridad en los aeropuertos. Los vuelos chárter, por el contrario, ofrecen una vasta gama de posibilidades y configuraciones que se ajustan a los requerimientos particulares de cada cliente. Por ejemplo, los servicios de taxi aéreo son una opción asequible y plena de comodidades para los viajes de trayecto corto. En este caso, los helicópteros, turboprops, pistons y light jets se convierten en la solución perfecta para aquellos viajeros que requieren aterrizar en pistas pequeñas – más cercanas a su destino final – o que deseen evitar los “hubs” más congestionados. Los aviones ejecutivos – aeronaves de fuselaje ancho equipadas con todos los recursos necesarios para cubrir rutas intercontinentales – resultan ideales para establecer un centro de negocios a 6.000 metros de altura. En efecto, sus instalaciones incluyen dormitorios privados, duchas, salas de conferencias, salas de estar y amplios pasillos.
Además, los operadores aéreos proporcionan asesoría a sus clientes para que puedan crear su propio plan de vuelo, garantizándoles control pleno sobre los principales aspectos: horarios, itinerarios, rutas, selección de piloto y tripulación. Si necesita posponer o modificar su vuelo, no se preocupe. Nadie se moverá hasta que Usted lo indique. Uno de los principios fundamentales de la aviación privada es que cada vuelo y cada aeronave deben ajustarse a las necesidades de los pasajeros. El lujo y el confort también tienen gran importancia en el mundo de los vuelos chárter. De hecho, los proveedores de servicios aéreos procuran hacer de cada viaje una experiencia lujosa, grata y vivificante. Por tal motivo incluyen servicios de catering, permiten el acceso de mascotas a bordo y garantizan el manejo seguro de equipos frágiles o especiales. También ofrecen personal bilingüe y otras exclusivas comodidades
Comúnmente se cree que los vuelos chárter están reservados de forma exclusiva para gente de negocios, artistas internacionales, grandes personalidades, o altos funcionarios de gobierno. No obstante, rentar un jet privado también es una excelente opción para familias y pequeños grupos que deseen probar algo distinto para vacacionar. Si desea disfrutar de servicios personalizados, lujo, confort y seguridad, entonces la aviación privada es para Usted. Sólo tiene que contactar un operador aéreo confiable como South American Jets y deleitarse con nuevas y gratas experiencias de viaje.
Max Brog;
CEO
South American Jets